Hay una serie de recetas que, en mi caso, me llevan a mis orígenes y me gustaría no perder, una son la migas, plato que siempre hacía mi abuelo al fuego, en la cocina del corral y de las que nunca me separaba mientras las hacía, después en las brasas del fuego de cocinar las migas mi abuela siempre metía algún choricito de "venao"... qué tiempos.
La foto la tengo en la cámara, esta tarde la subo.
Ingredientes:
- Migas
- Aceite
- Sal
- Agua
- Ajo
- Pimiento
- Chorizo
- Panceta
Elaboración:
Las migas las podemos comprar ya troceadas en muchas panaderías o con un pan que no sea del día las podemos cortar (podemos hacer cortes al pan de arriba a abajo (|) sin llegar al final del pan haciendo cruces (de delante a atrás y de derecha a izquierda) y después cortamos el pan en horizontal (-) y nos salen las migas muy fácilmente y más estéticas).
Llenamos un vaso de agua y disolvemos en él una cucharadita de sal, con este agua regamos las migas, yo lo hago con una cuchara sopera, voy echando el agua por las migas (ir las mojando ligeramente) y remuevo todas las migas; vuelvo a echar otra cucharada de agua y vuelvo a remover todas las migas, así hasta que me quedo sin agua.
A estas migas las pongo un trapo encima y las dejo reposar (una noche, 4 h...).
Lo más importante para las migas es la sal que echemos al agua, no vamos a echar más sal, así que de ahí depende que nos queden sosas o saladas y en el siguiente paso el aceite, en las últimas me pase de aceite y no quedaron muy bien.
En una sartén alta ponemos aceite, poco aceite, más que si fuésemos a hacer algo a la plancha, pero poco.
Freímos los dientes de ajo, el pimiento, el chorizo y la panceta y cuando cada cosa esté frita sacamos y reservamos.
En este aceite echamos todas las migas y nos liamos a remover durante un buen tiempo, por un lado para freírlas y por otro para que no se apelmacen, deberían quedar relativamente sueltas, jugosas y amarillentas.
Cuando estén apagamos el fuego y añadimos la carne y el pimiento y removemos un poco y dejamos reposar unos minutos.
En mi casa las acompañamos con uvas y están buenísimas, pero cada casa le añade lo que ve, sardinas, melón, huevos fritos, chocolate, leche...
Como postre, en mi casa, nos echamos en un plato hondo sólo migas (sin chorizo) y las echamos leche.
¡El siguiente paso tiene que ser hacerlas en el fuego!